Guáimaro, 02 marz. Las personas naturales y jurídicas que aún abriendo sus cuentas fiscales no gestionen e instalen los códigos QR a través de las variantes En zona o por Transfermovil están incurriendo en una indisciplina grave de su condición de contribuyentes que puede implicar la suspensión de esa condición y multas por mora que implicaran afectaciones económicas altas.
Hay varios lugares donde ya se implementa ese derecho del consumidor al pago electrónico en territorio guaimareño pero hay resistencia de muchos contribuyentes a su puesta en práctica alegando disímiles Inconvenientes para el depósito y la extraccion del efectivo en el banco sin contar quienes, irresponsables e indisciplinados , califican la bancarización como un fracaso.
En no pocos casos se priva a la población del pago y los cobros vía electrónica a sabiendas de que existen limitaciones para el efectivo en poder de la población que al verse privada de esa modalidad por reticencia de las personas naturales y jurídicas tienen que renunciar sobre todo a productos que se venden a altos precios entre ellos artículos industriales y alimenticios.
En esa situación están varios negocios particulares y estatales que encuentran siempre un pretexto o justificación para evadir el pago por las cuentas fiscales y empresariales como establecen las leyes vigentes.
La inacción de las autoridades y el débil funcionamiento de los grupos de fiscalización y control dan margen al sostenimiento de posturas indolentes y violatorias de las legislaciones puestas en marcha que dificultan la comercialización y la circulación del dinero de forma virtual a través de internet.
No todos los contribuyentes guaimareños son reacios a poner en práctica sistemáticamente los pagos y cobros electrónicos pues existen lugares donde lo utilizan discretamente pero lo utilizan y lo reconocen como una facilidad para la mercantilización y la prestación de servicios
Hay lugares dónde incluso se pagán las chequeras y salarios a los trabajadores que así lo solicitan utilizando el efectivo en caja obtenido por concepto de los cobros de mercancías en efectivo.